* Reiki * Energía de Amor Divino

Re-encuentra tu Auto sanación Física * Armonía Emocional * Claridad Mental * Protección Energética

Re-conoce la herramienta que Re-active tu AUTO-MAESTRÍA

Re-conecta tu Ser con El Amor Divino que es este Universo y date Permiso para un FIN*INICIAL en tu Vida!!!

Te invitamos a través de * Loto Blanco * y el Grupo Avatar Armonía a formar parte del Servicio Activo para el establecimiento de la Nueva Tierra de 5ta Dimensión!

NAMASTÉ!!!

"Te advierto, quien quieras que fueres, ¡Oh! Tú que deseas sondear los arcanos de la naturaleza, que si no hallas dentro de ti mismo aquello que buscas, tampoco podrás hallarlo fuera. Si tú ignoras las excelencias de tu propia casa, ¿cómo pretendes encontrar otras excelencias? En ti se halla oculto el Tesoro de los Tesoros ¡Oh! Hombre, conócete a ti mismo y conocerás el universo y a los Dioses." ORACULO DE DELFOS

viernes, 30 de junio de 2017

Quien eres

Saludos, queridos, Yo Soy Kryon del Servicio Magnético.

(pausa de 10 segundos)

Siempre hay una pausa. Difícil de explicar; es diferente para cada ser humano individual. Reaccionan de forma distinta ante el Espíritu. Cuando entran en meditación, cada uno lo hace a su manera. Tal vez están los que les dicen cómo deben hacerlo; ustedes los escuchan y luego lo hacen a su modo. La relación que tienen con el Innato, el Yo Superior, la pineal y el Espíritu es suya, única. Ese carácter único de quienes están frente a mí atrae nuestro amor por ustedes. Para ustedes es muy fácil mirar un océano de rostros, ya sea que estén sentados o parados, no importa. Cuando se reúnen en grupo hay una tendencia a lo mismo: todos los humanos están aquí juntos, por la misma razón, al mismo tiempo, en la misma postura, sentados en las filas de sillas. ¡Oh, no es así como nosotros los vemos! 

Quiero extenderme sobre el tema de por qué los amamos tanto. ¿Por qué el Espíritu ama de esta manera en que lo hacemos? Sí, ya sé que ustedes son familia, pero ¿qué más hay? La artista Debbie acaba de presentarles algunos pensamientos, y si ustedes pudieron captar algo que era un tema dentro de lo que ella enseñó, y darse cuenta y verlo, es que la energía que ustedes tienen y en la que nacieron, todo lo que los ha rodeado, provino de un cociente entre luz y oscuridad en el que ustedes estaban en minoría. Podrían decir, "Bueno, esas cosas pasan." Ciertamente. ¿Qué tal si les digo que el nuevo humano y la nueva humanidad van a tener una reducción en este tipo de cosas? ¿Me creerían? Si es verdad que su consciencia se está volviendo más sabia y están empezando a crear una realidad que ustedes diseñan. Eso significa que ustedes y sus hijos y los que los seguirán ya no tendrán que arrastrarse dentro de la vieja energía como lo han hecho, ustedes y sus hijos. 

¿Se preguntan por qué los amamos? 

En los primeros tiempos de los Estados Unidos no era fácil viajar hacia el Oeste. Las carretas cubiertas, tiradas por mulas y caballos, llevaban suministros; no personas. La mayoría de ustedes no sabían eso. Las familias caminaban al lado de las carretas, día tras día, y no había caminos. Los hombres abrían paso a través de los bosques con sus hachas para hacer lugar para el paso de los caballos tirando de las carretas, y a veces tenían que ayudar ellos mismos a tirar para atravesar los montes para llegar al oeste; las mujeres daban luz a sus hijos donde podían. Y algunos no sobrevivían. De hecho, la mitad no sobrevivía. A veces les llevaba más de un año en las sendas, comiendo lo que podían, racionando sus reservas como podían, cocinando con el sol, caminando junto a las carretas día, tras día, tras día, viendo morir a sus hijos. Qué historia, ¿eh? Puedes mirar hacia atrás en la historia, ¿verdad? 

Bien, quiero presentar cuánticamente a alguien que está en el auditorio. Querido, eras tú. El de la historia fuiste tú. ¿Y te preguntas por qué te amamos? ¿Tienes alguna idea de lo que hay en tu akasha? Realmente, ¡realmente! ¿Puedes imaginar algo así? Y no hace tanto tiempo de aquello. Ni siquiera es viejo. Esas son las penurias del corazón; lo físico ya era bastante malo, ¡pero decirle hola a un bebé en un momento y decirle adiós al momento siguiente! Era algo que perduraba toda la vida; y lo hiciste una y otra vez. Era parte del viaje. Y aquí estás; sabes quién eres. ¿Y te preguntas por qué te amamos? 

El capitán estaba muy orgulloso de su espléndido barco. Se ganaba la vida pescando. Era griego. Tenía olfato para los peces, y estaba orgulloso de eso porque esto era su herencia; su padre había hecho esto y su abuelo también, ahora lo hacía él. Era bueno en eso. A veces se quedaba en alta mar por largo tiempo para poder obtener la captura necesaria, llenando las bodegas del barco con peces, y volvía a la aldea sabiendo que la alimentaría tal vez durante semanas. 
 Grupo Avatar Armonía

Hasta aquel día fatídico en que una tormenta se le echó encima sin que él pudiera ver las señales, y estaba muy lejos en el mar. Por muy rápido que pudiera avanzar con su barco, no lograba escapar de la tormenta que acechaba. El barco cabeceaba y giraba, y él hacía lo que podía, como navegante experto, volviéndose hacia el viento, buscando el viento que cambiaba. Venía desde atrás. ¡Cuidado al estribor, aquí viene una ola, giren hacia la ola, ignoren al viento! Giraba hacia una y allí venía otra, y otra, y cada vez más grandes, hasta que se dio cuenta de que no había más que hacer: ¡no podría escapar! Gradualmente las olas golpeaban más fuerte, entraba el agua, no había forma de evacuarla, el barco comenzó a hundirse. Estrellándose contra las olas, sumergiéndose en un momento, y luego sumergiéndose un poco más cada vez hasta que vio las cosas flotando y su tripulación ahogándose frente a él, que estaba en el puente, y finalmente le tocó el turno. 

Siempre se había preguntado, como marino que era, cómo sería ahogarse: en esos momentos lo descubrió. Sus últimos pensamientos fueron sobre su esposa y su familia, y se hundió. ¡Y él está aquí! Está aquí, ¡y no le gusta el mar! (se ríe) No sabía por qué no le gusta. ¿Y te preguntas por qué te amamos como te amamos? 

Aquí hay historias. Almas antiguas, ¿cuántas de ustedes sintieron la hoja de la espada en la batalla? No era tanto el dolor de la hoja de la espada como el dolor del corazón al saber que todo había terminado! Solían ser hombres jóvenes, muy jóvenes. Pensar en su madre, en sus camaradas, en la vida tan corta que habían vivido; solo tuvieron unos momentos para mirar al cielo, esperando morir. El olor del humo. La batalla continúa sin ti. Y te vas. Esto ha pasado con casi todos ustedes; quiero decirles que han pasado eones batallando unos contra otros. Son buenos en eso: ¡mueren muy bien! Sí, pero ¿qué pasa con los del otro lado? (se ríe) ¿Cuántos de ustedes fueron los que clavaban la espada? Miren lo que han hecho. La experiencia de la energía más vieja que el planeta ha tenido: y ustedes estuvieron allí. Hay muy poco que este grupo no haya experimentado. 

La tristeza, la alegría, la celebración, toda emoción conocida para la humanidad, en su forma más elevada y en la más baja, la sintieron las almas antiguas de este grupo. 

Y les digo esto solo por una razón; quiero que se vean más grandes de lo que piensan: únicos. ¿Cómo creen que sería, cuándo tiempo llevaría hacer una película sobre ustedes y todas sus vidas? Una por una. Y todos viéndolas, una por una. ¿Cuánto tiempo creen que llevaría? 

Déjenme contarles la experiencia cuántica que tenemos con ustedes: nosotros vemos las películas todas juntas de una vez; sabemos quiénes son; vemos su experiencia y lo que han atravesado, y mientras se sientan aquí con este cuerpo como seres humanos modernos, nosotros sabemos más. ¿Y se preguntan por qué los amamos? 

La vieja energía de este planeta, que creaba esta clase de cosas masivamente, como las batallas, se terminó. Si les decimos que ha cambiado el cociente entre la luz y la oscuridad, la relación luz/oscuridad, ¿qué dirían? Los intelectuales dirían: "Bueno, qué bien. ¡Muéstramelo con un medidor! Dame los números." Y yo les diría: Muéstrenme el amor con un medidor; ¡denme los números! ¡No pueden! Porque está mucho más allá de la lógica de la humanidad ver algo tan profundo, que ha llevado tanto tiempo, mientras la Tierra se movía lentamente, y los vientos del cambio están soplando en la llanura, ¡la misma llanura en la que tal vez hayas muerto! 

Están aquí representando una nueva raza de luz. Sus hijos no pasarán las penurias que ustedes tuvieron. No sabrán nada sobre ellas. Les digo que la paz en la Tierra no es la meta: ya está dada. Cuando la humanidad empieza a madurar, ustedes dejan de matarse entre sí. Y cuando lo hacen, el planeta empieza a avanzar: hay más cooperación, aumenta la sabiduría, la luz se fortalece. 

Alma antigua, ya te he dicho esto: las vidas son demasiado cortas. Cuando regreses al planeta - y lo harás - habrá aumentado la expectativa de vida; despertarás como un niño con más sabiduría innata que la que jamás tuvo un niño al despertar en la Tierra. Parte de una nueva generación que desconcertará a sus padres como ya lo han hecho los índigos. Caminarán más precozmente, sabrán leer intuitivamente, sabrán que estuvieron aquí antes, será más que un deja vu. Comprenderán un poco más la luz que llevan, mantendrán su cabeza erguida y la autoestima no será un problema. La tendrán. Algunos pensarán que ustedes son arrogantes, porque saben demasiado; van a tener que acostumbrarse a que ustedes sí que saben. 

Representan un nuevo tipo de humano en este grupo y, la próxima vez que vengan, el planeta comenzará a poblarse no con almas antiguas, sino con las nuevas almas antiguas. Ha salido el sol; se empieza a construir la metáfora de la ciudad en la colina: la ciudad en la colina representa un planeta pacífico en que empiezan a darse cuenta de quiénes son. Las historias del tipo que les he dado en este mensaje, las leerán en los libros; no las experimentarán una y otra vez. Esa es la verdad. 

¿Puedes ver esto en su perspectiva más amplia? Tal vez, sentados en las sillas, todos juntos, en fila, son tan únicos; familia. 

Ah, si yo pudiera contarles las historias. Son hermosas. Me despido con esto: con todo lo que han atravesado, la pena y el sufrimiento; volverse chamán y luego tener que vivir en las afueras de la aldea porque nadie te quiere por ser extraño, no tener una pareja por la misma razón, tal vez que te maten porque el clima cambió y te echan la culpa, todas esas cosas. Aquí va la pregunta: cuando regresas a mi lado del velo y lo ves todo ¿por qué vuelves aquí? (se ríe) ¿¡Por qué!? 

Ahora bien: es la misma razón por la que vienes otra vez: eso es lo que haces. Ustedes son los pioneros de esta era y de la luz de esta era. Cuando se dan vuelta, cuando los veo con esa hermosa alma de luz, en el momento que ustedes llaman muerte y yo llamo renacer, en ese momento me miran y dicen: "¿Cuándo vuelvo? ¿Cuándo puedo volver? ¿Cuándo puedo volver?" Y yo digo: Si quieres, puedes descansar por un tiempo. Y se quedan allí mirándome. Se los digo como es: esto es la fructificación de miles de vidas de arrastrarse en la cosa vieja; ¡ustedes no se lo quieren perder! Y se quedan allí, y me miran hasta que el viento del nacimiento los empuja de vuelta a este planeta, en el momento apropiado que planearon con la familia y con quienes los van a acompañar. Sin karma; con sabiduría. ¡Han esperado esto por mucho tiempo! 

¿Y se preguntan por qué los amamos? ¡No se lo pregunten! 

Y así es.

Kryon 

Kryon por Lee Carroll 
Sedona, Arizona - 4 de junio de 2015 

jueves, 29 de junio de 2017

Sesiones ~ Cursos ~ Meditaciones

En la Infinitud de la vida, donde estoy, todo es perfecto, completo y entero.
Creo en un poder mucho mayor que yo, que fluye a través de mi en cada momento del día.
Porque se que en este Universo hay solamente Una Inteligencia, 
me abro a la sabiduría interior. 
De esta Única Inteligencia provienen todas las respuestas, toda curación, 
todas las soluciones, toda creación nueva.
En ese Poder y esa Inteligencia confío, 
sabiendo que todo lo que necesito saber se me revela 
y que todo lo que necesito me llega en el momento, el lugar y el orden adecuados.
Todo está bien en mi mundo!
Louise L. Hay



                                                                    

lunes, 26 de junio de 2017

Desviaciones de la personalidad

¡MARAVILLOSA Semana!!!


Un empleado acude a ver a su jefe.
-Señor director, estimo que mi salario no se corresponde con mis capacidades.
-Comprendo los esfuerzos que hace por estar a la altura de él -suspira el jefe-. Siga esforzándose: tiene que alimentar a su familia.

Vivimos disconformes. Siempre pedimos más, sin damos cuenta de que la vida es un maravilloso regalo... Claro está que podemos equivocarnos y contentarnos con una ilusión, considerando el ego de algún otro -de un pariente, un amigo, un cónyuge, un actor, un político, un gurú- como nuestra esencia absoluta. «Si el otro desaparece, yo muero.» Perdemos de vista que somos un ser único, inscrito para siempre en el punto de memoria formado por el cruce del espacio infinito y el tiempo eterno. Aceptar esto es recuperar la alegría, la energía superior, la solidez del adulto, el enorme potencial de vida que nos sostiene.

Hemos hablado de Cuerpo, Alma y Espíritu. Si representamos al Dios interior con la figura del sol, esa tríada la representaremos con la figura de la luna. Ella, receptividad absoluta, dejando de lado todo deseo de poder, se entrega humilde a reflejar la luz del astro rey. El Yo personal y el Yo superior se entregan al Yo esencial y obedecen su voluntad. «Porque no sois vuestros, sois del Espíritu Santo», dicen los evangelios.

Si negamos la existencia de nuestro tesoro interior, si despreciamos por invisible el diamante perfecto, si no aprendemos a agradecer el pan nuestro de cada día, podemos acabar viviendo como seres emocionalmente inmaduros y con una personalidad desviada. Los senderos negativos que se alejan del justo camino central son numerosos. Extraviados de aquel que nos conduce a la unidad, recorremos más de una vía equivocada... He aquí algunas, que podríamos ir subrayando al reconocemos en ellas:

Decimos no saber o no poder amar y de pronto nos apegamos a personas tan incapaces de hacerlo como nosotros, convirtiéndonos en adictos de esta dolorosa relación... No podemos concebir que el amor sea humano: lo divinizamos, exigiendo perfecciones imposibles... No aceptamos que las relaciones afectivas sean dinámicas, transformables... Lloramos porque el mundo es como es y no como nosotros queremos, es decir: que todo se detenga y que nada ni nadie cambie... No sabemos ni recibir ni dar, vivimos encerrados en un reclamo insatisfecho, imposible de definir, y si nos encontramos con alguien que nos ama, no sabemos cómo mantener esa relación, deseamos que sea instantáneamente perfecta sin reconocer que una pareja equilibrada se consigue sólo después de un arduo trabajo y que, si los sentimientos no se acompañan del desarrollo de una comprensión caritativa de las necesidades del otro, se marchitan... Somos víctimas de nuestras pulsiones, sin creer que podemos conducirlas de la autodestrucción a una vida mejor... No queremos saber nada profundo de nosotros mismos, quiénes somos, cómo funcionamos; ansiamos que se nos divierta, pero superficialmente; tememos todo aquello que nos revele nuestra profunda insatisfacción... Cada vez somos más inestables, incapaces de asumir cualquier responsabilidad... Muchas veces, a pesar de tener el corazón cerrado, por temor a la soledad  inventamos sentimientos amorosos que luego nos encarcelan en una relación que nos agobia...

Impotentes e inútiles, no tenemos metas, no tenemos proyectos, no tenemos voluntad, trabajamos en cosas que no nos gustan... Sin fuerzas para enfrentar el combate de la curación, nos aquejan accesos de incontrolable tristeza, sentimos ganas de morir y sobrevivimos con trucos: reprimimos nuestros deseos, ignorándolos... Desplazamos nuestros problemas acusando a otros de causados; y los sublimamos queriendo salvar a todo tipo de víctimas, pero sin ayudamos a nosotros mismos... Nos identificamos con grupos, y en ellos ahogamos nuestra personalidad, sean sectas con sus gurús, religiones con sus premios y castigos, partidos políticos con sus deshonestas promesas o infantiles fanatismos, hacia deportistas o artistas famosos... Lo que al interior le reprimimos, lo proyectamos al exterior; lo que somos no queriéndolo ser, se lo reprochamos a los otros... Disfrazamos los pensamientos negativos exagerando desmesuradamente los positivos: aun sabiéndonos fracasados, nos mostramos como satisfechos; aun sin tener deseo de ello, nos obligamos a mantener relaciones sexuales o a hacer apasionadas declaraciones sobre algo... Nos refugiamos en lo que creemos que es nuestro sentido común, lo explicamos todo a través del intelecto negándonos el acceso al inconsciente: «Los sueños sólo son sueños»,
«En el fondo no es eso lo que yo quería», «Me da lo mismo, no valía la pena», etc. Cada vez nos comportamos más como niños, buscando a alguien que nos ponga límites, que organice nuestra vida... Débiles, despreciamos la debilidad de los otros y vampirizamos la energía de quienes nos ayudan... Necesitamos el reconocimiento social: hemos de sentirnos importantes, cueste lo que cueste; aspiramos a premios, a ropas que nos sienten bien, a que nuestro nombre acabe convirtiéndose en una señal del éxito, pero al mismo tiempo deseamos la soledad, aislarnos, encerrarnos en un limitado territorio mental... Sufrimos por no alcanzar la perfección: nos operamos para cambiar pequeños defectos corporales, creemos que todo cuanto hacemos es un fracaso, que ningún dinero nos basta, que nadie reconoce lo que verdaderamente valemos o que somos inflexibles en el sostenimiento de ciertos valores... Avaricia, rigidez y obstinación son nuestras fieles compañeras, no corremos ningún riesgo por temor a hacer el ridículo o a ser criticados, no realizamos nuestra obra porque sabemos que al final tampoco estaremos satisfechos de ella... Sentimos que nos persiguen, que nos quieren engañar, que todo el mundo es sospechoso y la gente que nos rodea es desleal, que nuestras palabras son utilizadas en nuestra contra: ¡nunca olvidaremos ni perdonaremos el mal que nos hacen, los humillaremos y destruiremos tal como ellos quieren humillarnos y destruirnos!... Nada nos satisface, no soportamos tener amigos íntimos salvo que sean nuestros padres, no nos parece deshonesto mentir, la seguridad de los otros no nos importa, tenemos creencias raras, supersticiones o percepciones poco habituales, escuchamos voces, nuestro propio cuerpo nos agrede... Nadie más que nosotros merece nuestro amor, exageramos nuestras capacidades, esperamos que se reconozca que somos seres superiores, necesitamos triunfar, sólo las personas que han alcanzado nuestro nivel pueden comprendernos, y despreciamos a los demás pero envidiamos lo que logran; ellos, por su parte, tienen celos de nosotros... Totalmente dependientes, no podemos tomar decisiones, no podemos expresar nuestros desacuerdos o críticas, no podemos tener proyectos porque nadie tiene confianza en nuestras virtudes, accedemos a realizar las tareas desagradables, nos han abandonado, somos incapaces de ocuparnos de nosotros mismos, buscamos con desesperación una pareja sospechando que nunca la encontraremos... Hemos perdido la identidad,  no sabemos lo que somos, tenemos ganas de rodar cuesta abajo, entregarnos a excesos, automutilarnos, suicidarnos... Nos sentimos seguros cuando cubrimos nuestra piel con tatuajes o nos atravesamos las carnes con adornos metálicos... Nos dejamos inundar por las emociones, nos cuesta controlar nuestros ataques de cólera o nuestra agresividad verbal y corporal, hacemos lo posible por ser el centro de atención, adoptamos tonos de voz, palabras y gestos seductores... Egoístas, tomamos cuando tenemos necesidad y abandonamos cuando nos sentimos saciados...

Debemos añadir a este incompleto menú a aquellos que comercian con el fracaso de los otros. (Un gran porcentaje de la publicidad comercial explota la angustia de los individuos confusos e inconformes.)

Un empresario de boxeo dice:
-Yo siempre triunfo porque hago negocio de la derrota de mis pupilos. Por ejemplo, tengo un boxeador al que noquean tan a menudo que le he hecho llevar el nombre de nuestro patrocinador en la suela de sus zapatillas.

Otro chiste muestra de manera contundente que es posible escapar de las fuerzas negativas haciendo un esfuerzo supremo por encontrar apoyo en lo más profundo de nosotros mismos:

Joe, un viejo luchador, ha soñado siempre con vencer a El Destructor, el campeón supremo, pero su entrenador se ha opuesto a ello una y otra vez. El Destructor conoce una agarrada secreta con la que ha vencido a todos sus contrincantes. Pero Joe insiste tanto que al final le consiguen el ansiado
combate.
La pelea comienza. El Destructor se lanza sobre Joe y le aplica su agarrada secreta. El entrenador cierra los ojos. Escucha un gran rugido seguido por el clamor de la multitud. Abre los ojos para contemplar el desastre... ¡y ve que Joe ha conseguido desprenderse de su atacante y desmayado, ganando el combate!
Al regresar al vestuario, el entrenador pregunta a Joe qué ha hecho para lograr tal milagro. Éste le responde:
-Estaba yo cabeza abajo, con la cintura oprimida entre los brazos de El Destructor, replegado sobre mí mismo, hecho un nudo. Iba a declararme vencido cuando de pronto vi un par de testículos. Supe que era mi única oportunidad para hacer que me soltara, y entonces, como el paquete estaba a la altura de mi boca, le di un tremendo mordisco.
-¡Oh, qué espíritu de lucha! -dice el entrenador-o ¡Te felicito: aunque no sea elegante, en cualquier caso ha sido muy eficaz!
-Sí -responde Joe-, es increíble lo que un hombre logra hacer cuando se muerde sus propias pelotas.

Un maestro zen pregunta: «¿Quién puede quitar el collar a un tigre salvaje?».
La respuesta es: «¡Quien se lo puso!». 

Nosotros somos el tigre, nuestros problemas forman un collar mental, podemos vencer al enemigo interno dejando de ponernos límites. Es posible convertir los acontecimientos adversos en oportunidades benéficas.

Roban en una tienda de ropa y los ladrones se llevan todos los vestidos. Al día siguiente, el propietario coloca un cartel en el escaparate que dice: «También los ladrones se visten en nuestra tienda».

ALEJANDRO JODOROWSKY
Cabaret místico

domingo, 18 de junio de 2017

No hay méritos

¡MARAVILLOSA Semana!!!


Jaime y Samuel se encuentran:
-¿Cómo te va? -pregunta Jaime.
-Muy bien -responde Samuel. -¿De verdad, bien? -insiste Jaime.
-¡Sí, claro! Mi casa es vetusta. En invierno, me muero de frío; en verano, me ahogo. Con los
años, mi mujer se ha vuelto un monstruo y yo la tengo que soportar. Estoy sin un céntimo. Y, debido a mi edad, padezco cada vez más enfermedades. Pero, salvo eso, esto muy bien.

Es preciso admitir que ciertas personas se sienten bien dentro de su sufrimiento. Si su calvario terminara, se sentirían tremendamente mal. Desde la niñez se han acostumbrado a perder y a fracasar. Aprendieron que la vida es una dolorosa trampa de la que sólo se liberarán muriendo. Si sus problemas se solucionaran,  perderían su identidad y el nexo emocional que los une a sus familias y a su sociedad.

Temerían desaparecer. Sus males les transmiten la sensación de existir, los definen y los hacen «iguales a todo el mundo». Cargar con "una herida que nunca se cierra" es mucho mejor que averiguar quién se la abrió: les cuesta reconocer que fueron niños mal amados, no comprendidos, no tenidos en cuenta; que el molde en que los introdujeron, y que hoy los encierra, es sólo de naturaleza mental. Un texto zen dice:

«Si estás encerrado en un bloque de granito, ¿cómo sales? ¡Das un paso hacia adelante y danzas!».

Un judío sufre atrozmente porque usa zapatos que son demasiado pequeños para él.
-¿Por qué no compras zapatos de tu número? ¿Lo haces por ahorrar? -le pregunta, sorprendido, un amigo.
-¿Eres antisemita o qué? ¿Acaso crees que es porque soy un avaro? Si uso zapatos demasiado
pequeños es porque mis negocios van mal, porque proliferan los racistas, porque mi mujer piensa abandonarme y porque mis hijos me faltan al respeto. Entonces cada noche, en cuanto entro en mi casa, me quito los zapatos y me sucede la primera cosa agradable de todo el día.

Algunas personas caen en dependencias nefastas como las drogas, el alcohol o el juego para tratar de apaciguar su angustia. En seguida, cuando logran poner punto final a dicha dependencia, se  vanaglo-rian y buscan ser aplaudidas. ¿Pero qué mérito tiene salir de un problema en el cual ellas mismas se metieron? 

Bodhidharma, que introdujo el budismo zen en China, lo expresó con toda claridad cuando fue recibido por el emperador. Éste le dijo: «He hecho traducir dos mil sutras. He creado numerosos monasterios. ¿Qué méritos tengo?». Bodhidharma, vestido con harapos, miró con fijeza al poderoso emperador y le respondió: «¡No hay méritos!». Dio media vuelta y se fue a un lugar escarpado a meditar.

No podemos exigir reconocimiento por actos que consideramos meritorios.  Cuando hacemos algo natural, no es una cuestión de mérito. Tener buena salud no es una hazaña. Tampoco lo es iluminarse. ¿Acaso deben aplaudimos porque poseamos veinte dedos? .

Con gran orgullo, un hombre dice a sus amigos:
-Mi perro es muy obediente, cuando le digo «¿Vienes o no vienes?», él viene o no viene.

A veces sucede que nos engañamos. Creemos que dominamos una situación pero, en verdad, estamos totalmente dominados por ella... No hay mérito cuando se realiza una gran obra, porque el artista genial, el héroe, el campeón o el santo, al llegar a su objetivo, no logra una meta personal sino que obedece a la llamada de su Yo esencial, que a la vez obedece a los designios de la energía que sustenta el universo, transmitida por el Dios interior.

Si tenemos un mérito .no es por ser autores de la obra -ella se recibe de una dimensión que nos es superior-, sino por haber sido capaces de plegar nuestro Yo personal a la voluntad del Misterio: obedecer es convertirse en canal. Y para que el canal sea totalmente útil debemos vaciarlo de pensamientos huecos, sentimientos egoístas, deseos incontrolados y necesidades superfluas

ALEJANDRO JODOROWSKY
Cabaret místico

sábado, 10 de junio de 2017

Reunión Mensual Grupo Avatar Armonía

TE INVITAMOS A QUE MEDITES LA SIGUIENTE PROPUESTA Y SI RECONOCES QUE ES TIEMPO DE OFRECERTE A FORMAR PARTE DEL SERVICIO ACTIVO,  TE ESPERAMOS EL

Domingo 11 de Junio 
de 18,00 a 20,00 HS en FERRARI 820  

En ​meditación y servicio este año trabajaremos sobre  enseñanzas de autocuración, herramientas que nos ayudaran a recorrer el sendero en armonía y felicidad
;  realizaremos un mantreado de ARMONIZACIÓN (para el que deberás preparar una lista con los nombres de las personas que quieras colocar bajo el manto de protección, y otra
​ 
lista 
con nombres 
de personas que  necesiten
 sanación,
​ ​
(las dos listas en papel
 separado y escrito preferentemente con tinta verde
)

Gracias por participar y construir en comunidad la Nueva Tierra de 5ta dimensión!!!​



Recuerden, el trabajo no es con quien ya se encuentra en estos temas (por decirlo así)

sino con gente que no está en estos temas, trabajando con la clave de la INCLUSIÓN. 

Esto llevará tiempo y se necesita colaboración completa y obediencia divina... los objetivos dados anteriormente tal vez no los veamos nosotros o algunos de nosotros, pero se verán, porque alguien tuvo que preparar la tierra y plantar las semillas para que otros disfruten de una buena cosecha de trigo.

*******

Gracias por darnos esta oportunidad de crecer en conciencia juntos!!!!