Con Forma de Agradecimiento

Desde que Soy,
poseo un cuerpo
que se va gastando
con el paso del tiempo…

y un espíritu
inversamente proporcional
a tal evento.
Fortalecido se ve,
por el devenir
de los hechos.


No es un logro individual,
siempre tuve y tengo
un buen acompañamiento.


El Ser trascendente, mora en mí
y en todo el universo.
A Él le agradezco
el don de la vida
y el discernimiento,
para poder reconocer
lo bueno que me fue dado
sin hacer nada por merecerlo.


También le rindo homenaje
a tantos contemporáneos
que allanaron mi camino
para que pueda seguir andando,
en pos de mi destino.

Tantos seres desconocidos,
que por breves momentos
me prodigaron sonrisas,
ofrecieron ayuda,
sanaron mi cuerpo enfermo
o pronunciaron palabras,
que fueron bálsamo sublime
para mis desconsuelos.


Y de todo este enorme séquito,
como oasis en el desierto,
fue floreciendo en mi vida
un ramillete de amigos.
Me acompañaron algunos,
en largos tramos recorridos.

Otros ya no están…
pero en mis recuerdos,
con mucho amor,
continúan vivos…

Hoy, iluminados seres,
destellando como estrellas,
poblaron mi oscuro cielo,
que opacó al cálido sol
y me amenazó con tormentos.


A todos, y a cada uno de ellos,
dedico estos humildes versos,
que al escribirlos fueron tomando…
la forma del agradecimiento.


HILDA BATTAGLIESE 2009-04 18